Hola a todos los seguidores y visitantes de este sitio hoy analizando un poco sobre la oración y las respuestas que esperamos de Dios.
Quizás el título parece una falacia pero sigamos leyendo para entender mejor esta frase.
Muchas veces nos encontramos en situaciones en las que debemos dedicar tiempo de oración. Nada que discutir o decir contrariamente a esto pero como cristianos es nuestra reacción ante cualquier adversidad o eventualidad en nuestras vidas o al menos así debería ser, orar antes de actuar para recibir respuesta o guía para esa situación.
¿Podemos cansarnos de orar por mucho tiempo por lo mismo? ¿Qué producen las reiteradas oraciones por el mismo motivo en nuestras vidas? Son preguntas que hice muchas veces en mi vida de cristiana. Y últimamente volvió a suceder, volví a preguntarme por qué y hasta cuándo seguiré orando por esto sin ver las respuestas. Y no me refiero a solo orar tanto en lo personal, o en la intimidad sino pedir oración por la misma razón todas las veces que sea necesario. Lo bueno de esto es que me estaba pasando con una situación porque en otras cuestiones solo he orado quizás una vez, y he visto la respuesta y el favor de Dios en esa situación especial.
Ahora bien, ¿será cuestión de fe? ¿será cuestión de decisiones a tomar? ¿será cuestión de actuar además de orar?
Dice la palabra de Dios que la oración eficaz del justo puede mucho, no habla de tiempo en oración o si es larga o corta la oración. Sino que sea eficaz o sea eficiente, efectiva. Según el diccionario eficacia quiere decir capacidad de lograr el efecto que desea o se espera. Y si unimos a la eficacia la fe sabiendo que es la certeza de lo que se espera y la convicción de lo no se ve. Entonces si oramos eficazmente teniendo fe de que El nos oye seguro las respuestas vendrán a Su tiempo y no al nuestro o esperando que Dios escuche y responda a nuestros antojos tan humanos y caprichosos.
Dios es fiel, El oye nuestras oraciones y si hay algo que conmueve el corazón de nuestro Señor es la fe, la fe en sus promesas, creyendo que cuando me acerco en oración, sé que El está, y es galardonador de los que buscan.
Entonces si estás decaído o con falta de fe, o enojado porque no aún no hay respuestas, reposa en Sus promesas que pronto llega esa bendición.
Dice la palabra de Dios que la oración eficaz del justo puede mucho, no habla de tiempo en oración o si es larga o corta la oración. Sino que sea eficaz o sea eficiente, efectiva. Según el diccionario eficacia quiere decir capacidad de lograr el efecto que desea o se espera. Y si unimos a la eficacia la fe sabiendo que es la certeza de lo que se espera y la convicción de lo no se ve. Entonces si oramos eficazmente teniendo fe de que El nos oye seguro las respuestas vendrán a Su tiempo y no al nuestro o esperando que Dios escuche y responda a nuestros antojos tan humanos y caprichosos.
Dios es fiel, El oye nuestras oraciones y si hay algo que conmueve el corazón de nuestro Señor es la fe, la fe en sus promesas, creyendo que cuando me acerco en oración, sé que El está, y es galardonador de los que buscan.
Entonces si estás decaído o con falta de fe, o enojado porque no aún no hay respuestas, reposa en Sus promesas que pronto llega esa bendición.
Ahora volviendo al principio y a la frase matadora "cuando dejé de orar Dios me respondió", el Señor ha sido tan fiel conmigo, y es por su gracia, amor y misericordia que recibo a su tiempo cualquier cosa que pido, a veces parecería que no llegan jamás esas respuestas que anhelo con todo el corazón, pero fiel es Dios que no nos dejará sin su favor.
La experiencia de orar y saber con certeza de que Dios nos oye es lo que nos mantiene firmes en la fe, la bendición de sus respuestas es obra de su gracia y fidelidad con nosotros.
¿Tienes dudas sobre tus oraciones hacia Dios? ¿Crees que no te oye? ¿Crees que El no está atento a tus oraciones y pedidos?
Una de las historia bíblicas que me apasiona es la de David además de que en este sitio encontrarán una serie de estudios sobre él. A pesar de sus pecados y fracasos él no cesaba de orar a Dios sea cual sea el momento o situación que vivía. Les dejo unos versículos de ejemplo:
"Escucha, oh SEÑOR, una causa justa; atiende a mi clamor. Presta oído a mi oración que es de labios sin engaño". Salmos 17: 1
"¡El SEÑOR ha escuchado mi ruego! ¡El SEÑOR ha aceptado mi oración!". Salmos 6: 9
"Hazme justicia, oh SEÑOR, porque yo en mi integridad he andado. Asimismo, he confiado en el SEÑOR; no vacilaré". Salmos 26: 1
"Atiende, oh Dios, mi oración; no te escondas ante mi súplica". Salmos 55: 1
"Escucha, oh Dios, mi voz en mi oración; guarda mi vida del miedo al enemigo". Salmos 64: 1
"Tú oyes la oración; a ti acudirá todo ser". Salmos 65: 2
Estos salmos donde David expresa sus formas y niveles de oración ante Dios. Manifestando súplica y ruego, protección ante sus enemigos, agradecimiento, alabanza.
David asiduo en la oración! Entonces está bien dejar de orar, claro que no ante cualquier pedido, súplica a nuestro Dios la mejor y primera reacción debe ser orar y dedicar tiempo en su presencia, esperando con fe sus respuestas. Orad sin cesar dice además su palabra, y esto es no dejar de orar, o sea de hablar con Dios a diario y continuamente.
El nos ama y conoce hasta lo más íntimo de nuestro ser, sabe y conoce lo que anhelamos, lo que estamos atravesando.
La oración es la llave a esa respuesta esperada de lo Alto.
Es la fórmula para acercarnos más a Dios.
Es el llamado gratuito, cercano y que nos permite llegar a su trono de gracia.
Dios responde en tiempo y forma. Eso es lo que debemos saber. Así que oremos confiando en que El ya tiene la mejor respuesta a cada uno de nosotros.
Dios te Bendiga!
La experiencia de orar y saber con certeza de que Dios nos oye es lo que nos mantiene firmes en la fe, la bendición de sus respuestas es obra de su gracia y fidelidad con nosotros.
¿Tienes dudas sobre tus oraciones hacia Dios? ¿Crees que no te oye? ¿Crees que El no está atento a tus oraciones y pedidos?
Una de las historia bíblicas que me apasiona es la de David además de que en este sitio encontrarán una serie de estudios sobre él. A pesar de sus pecados y fracasos él no cesaba de orar a Dios sea cual sea el momento o situación que vivía. Les dejo unos versículos de ejemplo:
"Escucha, oh SEÑOR, una causa justa; atiende a mi clamor. Presta oído a mi oración que es de labios sin engaño". Salmos 17: 1
"¡El SEÑOR ha escuchado mi ruego! ¡El SEÑOR ha aceptado mi oración!". Salmos 6: 9
"Hazme justicia, oh SEÑOR, porque yo en mi integridad he andado. Asimismo, he confiado en el SEÑOR; no vacilaré". Salmos 26: 1
"Atiende, oh Dios, mi oración; no te escondas ante mi súplica". Salmos 55: 1
"Escucha, oh Dios, mi voz en mi oración; guarda mi vida del miedo al enemigo". Salmos 64: 1
"Tú oyes la oración; a ti acudirá todo ser". Salmos 65: 2
Estos salmos donde David expresa sus formas y niveles de oración ante Dios. Manifestando súplica y ruego, protección ante sus enemigos, agradecimiento, alabanza.
David asiduo en la oración! Entonces está bien dejar de orar, claro que no ante cualquier pedido, súplica a nuestro Dios la mejor y primera reacción debe ser orar y dedicar tiempo en su presencia, esperando con fe sus respuestas. Orad sin cesar dice además su palabra, y esto es no dejar de orar, o sea de hablar con Dios a diario y continuamente.
El nos ama y conoce hasta lo más íntimo de nuestro ser, sabe y conoce lo que anhelamos, lo que estamos atravesando.
La oración es la llave a esa respuesta esperada de lo Alto.
Es la fórmula para acercarnos más a Dios.
Es el llamado gratuito, cercano y que nos permite llegar a su trono de gracia.
Dios responde en tiempo y forma. Eso es lo que debemos saber. Así que oremos confiando en que El ya tiene la mejor respuesta a cada uno de nosotros.
Dios te Bendiga!
TodoGospel by Rachel
